������ϲʿ�������ֳ�ֱ��

México, 26 de mayo de 2021 (UICN). Durante el periodo que comprendió el desarrollo e implementación del Proyecto Protección de Recursos Naturales Selva Maya, que incluye el sureste de México, fue posible realizar varias actividades de alto impacto con resultados exitosos medibles.

El Proyecto Protección de Recursos Naturales Selva Maya, implementado en áreas naturales protegidas del sureste de México, ha facilitado y hecho posible el desarrollo de actividades de impacto con diversos resultados para la efectividad del manejo, desde la realización de talleres para proponer que las aguadas de la Reserva de la Biosfera Calakmul sean reconocidas como Sitios Ramsar ante la Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional hasta la adquisición de equipo y más de diez vehículos que además de fortalecer la operatividad de manejo de las áreas protegidas, brindan seguridad al capital humano al realizar sus funciones de protección y conservación.

Estas actividades han incluido la participación de diversos actores y sectores, tanto para cumplir un objetivo a nivel de área protegida, de país y de región Selva Maya, e inclusive en un contexto internacional por compromisos de México, por ejemplo, ante la Convención de Patrimonio Mundial Cultural y Natural de la UNESCO. El Proyecto facilitó la elaboración del Plan de Manejo del Bien Mixto de Patrimonio Mundial “Antigua Ciudad Maya y Bosques Tropicales Protegidos de Calakmul, Campeche”, así como una “Estrategia integral de respuesta ante el impacto de los incendios en el hábitat de flora y fauna” del Bien de Patrimonio Mundial Natural Sian Ka’an.

Para el doctor José Armando Alayón-Gamboa, Ganadería Sustentable y Cambio Climático, Dpto. Conservación de la Biodiversidad, del Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR), su experiencia de adaptar el Estándar de la Lista Verde de la UICN,a las condiciones de la Selva Maya fue altamente positiva y alentadora, para dar pasos firmes hacia la sostenibilidad y conservación del ecosistema que se comparte entre México, Guatemala y Belice.

“Esta herramienta ha permitido trabajar de forma homogénea criterios entre las distintas reservas de la biósfera y reservas privadas que forman parte del proyecto Selva Maya. Además, ha enriquecido el trabajo como equipo trinacional las experiencias del grupo de trabajo desde su ámbito de acción. Pero sobre todo la aplicación de los criterios está ayudando a que las Áreas Naturales protegidas Silvestres, ANP’s y Reservas Privadas transiten hacia una visión holística de la sustentabilidad del ecosistema a través de su mejora en indicadores que se evalúan. Esto ayuda a que se sugieran puntos (criterios e indicadores) necesarios a fortalecer, o mejorar, según sea el estatus de avance de cada reserva”, comentó el Dr. Alayón-Gamboa.

Con la asistencia financiera del Proyecto en México, se coordinó varios talleres, como el de análisis de la viabilidad de promover la designación de aguadas como humedales de importancia internacional ante la Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional (Convención de Ramsar); y el taller para el Establecimiento de transectos de muestreo para la caracterización de combustibles forestales, en el Área de Protección de Flora y Fauna Bala’an K’aax, a fin de fortalecer los conocimientos de las brigadas comunitarias, a través de herramientas para mejorar la construcción de transectos.

En seguimiento al proceso de diseño del Estándar de Competencias para las Brigadas comunitarias del Área de Protección de Flora y Fauna Bala’an K’aax, se logró la integración del Comité de Gestión y el Grupo Técnico de Expertos en la Función Individual, así como la firma de instalación del Comité, asignada por el Comisionado Nacional de Áreas Naturales Protegidas. Alcanzar un Estándar de Competencias, permitirá que las Brigadas acrediten el conjunto de conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes, con las que deben contar para ejecutar una actividad laboral, con un alto nivel de desempeño.

Cabe destacar que durante el año 2021 se logró concluir el proceso de evaluación administrativa para la adquisición de un contenedor para el Área de Protección de Flora y Fauna Bala’an K’aax. Con la compra del contenedor se fortalecerá la operatividad y funcionalidad institucional, además de que se tendrá presencia en territorio y podrán cumplir las funciones que el personal lleva a cabo para la protección y conservación de este ecosistema.

UICN / Eric Ecker

El Proyecto Protección de Recursos Naturales Selva Maya, implementado en áreas naturales protegidas del sureste de México, ha facilitado y hecho posible el desarrollo de actividades de impacto con diversos resultados para la efectividad del manejo.

Destacó el Dr. Alayón-Gamboa, que el proyecto está en la primera fase y ha dado pauta a que se detecten necesidades importantes de atender en algunas ANP’s. “La capacitación, acompañamiento, y guía de expertos de UICN ha sido altamente motivador y de gran riqueza para que, como miembro de un equipo, podamos desempeñar el trabajo. Los impactos de este proceso sobre la sostenibilidad y la conservación sin duda se verán reflejados más adelante, en las evaluaciones posteriores que se realicen una vez inscritas las distintas reservas en la Lista Verde”.

Por otro lado, se unieron a los talleres varias consultorías como la de “Estrategia integral de respuesta ante el impacto de los incendios en el hábitat de flora y fauna del Complejo Sian Ka’an, que aportó el manejo adecuado de la zona, incorporando información sobre las causas y efectos de los incendios.

“Los recursos económicos, el aporte técnico y el equipo aportado por el Proyecto deben fortalecer el manejo del área natural protegida, además deben colaborar para que este proceso social, ambiental y político se consolide con un objetivo único que es la conservación del área”, manifestó el Biól. Felipe Ángel Omar Ortíz Moreno, director de la Reserva de la Biósfera Sian Ka'an.

Según mencionó el biólogo, para la Reserva de la Biósfera Sian Ka'an, el Proyecto ha permitido tener un trabajo en sitios donde existe una pérdida de cobertura forestal por actividades ganaderas y actividades agrícolas, y se ha dado seguimiento para proyectos que están fomentando la agroforestería, la silvicultura, la restauración de suelos, la mitigación de impactos negativos que hay de interacciones entre fauna silvestre y ganado, así como la capacitación a pobladores campesinos y ganaderos que viven en esta zona para que no se continúen en los procesos de reforestación y ayudarlos paralelamente a producir sin deforestar.

“Este Proyecto inicialmente ha ayudado a consolidar procesos de vinculación entre diferentes entes de gobierno, instituciones académicas e instituciones de gobierno estatal federal y municipal, así como a fortalecer los vínculos con las comunidades y los pobladores que realizan estas actividades, por otro lado en el tema de incendios forestales, el poder tener  un documento que analice las causas de los incendios, proponga soluciones en sus causas y tenga propuestas técnicas para mejorar la supervisión y vigilancia de las áreas protegidas y fomentar la participación social ha sido crucial”, concluyó el Biól. Ortiz Moreno.

La conservación de las áreas protegidas y de la Selva Maya, también se realiza desde la planeación y desarrollo de actividades productivas sustentables, varias de éstas, apoyadas por el Proyecto con capacitación, análisis de factibilidad y sostenibilidad comercial, en algunos casos, la detección de oportunidades y apoyo financiero para mejorar y obtener o mantener la certificación de Sello Colectivo Calakmul, y en otros, a través de la adquisición de equipo y diversos insumos para dar sostenibilidad a empresas comunitarias como las productoras de miel, prestadoras de servicios turísticos, creadoras de artesanías, etc.

“Gracias a este Proyecto hemos logramos trabajar en la recuperación de los cuerpos de agua en diez diferentes comunidades, las cuales se trabajaron desde el monitoreo comunitario, el cual nos permite conocer el estado de los cuerpos de agua dentro y alrededor de la reserva, acción que se pudo alcanzar gracias al apoyo del Proyecto”, manifestó José Adalberto Zúñiga Morales, Director Reserva de la Biosfera Calakmul.

El Sr. Zúñiga Morales comentó que el Proyecto les proporcionó 40 nuevos vigilantes que colaboraron con temas de monitoreo de la situación de amenazas, anteriormente solo se contaba con 16 personas para administrar las 723.000 hectáreas de la zona.  Se logró una coadministración del territorio entre el Gobierno Federal y los vigilantes comunitarios.

“En tiempos de crisis climática, tenemos las esperanzas puestas en la conservación de la Selva Maya por el bien de la vida en el planeta, por lo que no nos queda la menor duda de la necesidad de redoblar esfuerzos y aprovechar la ayuda de la cooperación internacional para garantizar la vida silvestre en el planeta”, aseveró el director de Reserva de la Biosfera Calakmul.