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Ante el derrame de petróleo ocurrido el pasado 15 de enero en la zona de Ventanilla, provincia de El Callao, adyacente a la ciudad de Lima, Perú, la Oficina Regional de la UICN para América del Sur se une a la �������貹ñ�� de para apoyar en los temas de rescate y remediación de los ecosistemas marino-costeros dentro de las áreas naturales protegidas que fueron afectadas.

Este desastre ambiental es el más grave acontecido en la historia de dicho país, pues involucra un volumen aproximado de que han impactado a una extensión importante del mar y las playas en la costa central de Perú, incluyendo dos áreas protegidas del sistema nacional: Reserva Nacional Islas, Islotes y Puntas Guaneras y Zona Reservada de Ancón.

©Jorge Pezantes / SPDA

Invitamos a otras organizaciones y la ciudadanía en general a ser parte de esta iniciativa para la recuperación y conservación, a largo plazo, de los ecosistemas y la fauna que se han visto perjudicados a raíz de esta catástrofe de grandes magnitudes.

"Todas las organizaciones civiles nos hemos unido para presentar un canal de recepción de donaciones que transmita seguridad y transparencia para poder alcanzar la meta urgente de multiplicar las donaciones”, comentó Anton Willems, CEO de Profonanpe. “ es el resultado del trabajo en equipo que hoy todas las organizaciones y movimientos ciudadanos debemos mostrar para superar esta tragedia ambiental que es sin duda una de las más horrendas de la historia de nuestro Perú”.

Esta iniciativa está impulsada por Profonanpe, Oceana, La Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), Conservamos por Naturaleza, SOA, ecOceánica, H2O Oceános, entre otras, con el apoyo de las agencias Mambo y Fusión. Sin embargo, es importante recalcar que más de una veintena de organizaciones y colectivos civiles están realizando esfuerzos diversos, a través de otros mecanismos de ayuda.

La UICN América del Sur expresa su profunda preocupación ante esta emergencia ambiental y reitera su apoyo y solidaridad con la República del Perú, Estado Miembro de la UICN. Además, responde de manera positiva a la solicitud del Comité Peruano de la UICN para unir esfuerzos y así conseguir un mejor resultado en beneficio de la naturaleza y la población que vive en las zonas aledañas al sitio de afectación.

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